Soledad...
Irrumpes
en mi vida de nuevo, llenándola de oscuridad y desesperación.
Han
pasado 3 días y 2 noches desde que la vi en aquel restaurante, da
igual la gente por la que esté rodeado, tan sólo pienso en volver a
encontrar esos ojos grises como el hielo, que hicieron que mi corazón
volviera a latir. Mientras la busco, junto a mi sigues tú, Soledad.
Tan
solo con una mirada me dio la vida, pero al irse la volví a perder.
Soledad
triste Soledad, que cae sobre mi como un manto de oscura tristeza.
Camino
por la plaza en la que la vi, buscándola debajo de cada arco, en
cada rincón, en todas y cada una de las terrazas, en las oscuras
calles que se esconden entre los edificios. No la encuentro.
¿Dónde
éstas amada mía? Sin tu mirada mi corazón seguirá marchitándose
segundo tras segundo, la luz del día no llegará a mi mundo de
tinieblas, por el cual seguiré caminando perdido sin rumbo.
Soledad,
que no me abandonas, y envenenas mi corazón, a cada momento que
pasa.
Aquí
sobre esta triste piedra, deposito este papel manchado de palabras y
sentimientos, de ilusiones, y amor. Deseando que en algún momento
tus ojos grises se fijen en ella, y en su lugar mañana me encuentre
tu mirada, bajo esos rizos rebeldes que se escapan de tu cabello.
Mañana
volveré, a la misma hora al mismo lugar.
Acompañado
de mi oscura soledad, esperando que la luz de tus ojos, la destierren
de mi vida.
Muy bonito Samy. Déjame decirte que has mejorado mucho escribiendo, y me encanta que tus relatos tengan ese...toque oscuro. Ya te lo he dicho otras veces.
ResponderEliminarBesos guapa
Gracias guapisima
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